¡No te conformes!

¿Estás a gusto con la vida que llevas en este instante? ¿Tu trabajo te satisface?, ¿y tu pareja, tus amigos, tus relaciones sociales, tus actividades?

Si haciendo balance la respuesta es positiva en cada una de estas parcelas, o de cualesquiera otras que consideres básicas para ti, entonces enhorabuena, ahora solo tienes que seguir invirtiendo tiempo y cariño y cuidar que no se estropeen. 

Pero si no todo está en el orden que deseas, no te conformes. Cada persona es un ser único y auténtico y hay personas para un roto y para un descosido. Así que, ¿por qué te vas a conformar con compartir tu vida con alguien que no te llena o que no te aporta el 100% de lo que te mereces?. Si tienes un trabajo que no te permite desarrollarte profesionalmente y sientes que hay mucho más que puedes ofrecer, ¿por qué no plantearse otras opciones de trabajo?. Si tus relaciones personales no son del todo satisfactorias, ¿por qué no cambiar y conocer a nuevas personas?.

Absolutamente todo se puede cambiar. Es cierto que hay cosas, situaciones y personas que nos vienen impuestas de fábrica, como es el caso de la familia, por ejemplo, a la que no podemos elegir y simplemente nos toca. Sin embargo, cada uno de nosotros puede y debe decidir cómo quiere relacionarse con el entorno y las circunstancias, sean las que sean. 

¿Cómo saber si todo está en orden en tu vida o, si por el contrario, necesitas poner tu vida en orden? En realidad, es más fácil de lo que parece, solo tienes que escuchar los "peros" de tu corazón. Tu "yo" interno siempre te va a guiar en la buena dirección si sabes escucharlo y te atreves a hacer los cambios necesarios.

Recuerda que siempre puedes hacer algo para conseguir lo que quieres y te mereces, porque no vale conformarse con las migajas que te ofrece otra persona, con una situación que te hace daño o con un trabajo que no te proporciona el bienestar que necesitas. Así que... ¡no te conformes!